Fachadas y paneles

Son elementos de hormigón armado modelados en mesa vibrante que cuentan con una cara lisa y la opuesta fratasada. Los paneles prefabricados son fundamentales en la construcción industrializada y su rápida puesta en obra los ha colocado como la solución preferida en edificación comercial, industrial e institucional y se abre camino en la residencial. 

La fachadas estándar se fabrica en espesores de 12, 16 y 20 cm. Pueden ser macizas o  pueden incluir una capa intermedia de aislamiento (poliestireno expandido, poliestireno extruido, espuma aglomerada de poliuretano...) y se le puede proporcionar cualquier tipo de variante de obra: esquinales, huecos (puertas, ventanas,...), encuentros con pilares, etc.

Las fachadas de hormigón arquitectónico se diseñan específicamente para cada proyecto, en principio, sin restricciones de  dimensiones, formas y acabados. En el caso de edificios de varias plantas suelen obedecer a un esquema de "peto-dintel". Frente a las fachadas estándar: no suelen llevar aislamiento incorporado por lo que necesitan trasdosados y las dimensiones de cada pieza son más pequeñas para facilitar su instalación con grúas de obra (1 o 2 toneladas de peso máximo). Su producción es más lenta que la de los elementos estándar y su montaje algo más laborioso al ser mayor el número de piezas.

Es posible dar a la cara vista de los paneles un acabado especial (fachadas texturizadas), por ejemplo: imitación de piedra o madera, inclusión de textos o logos, diseños geométricos, etc.